53. chien - La Evolución


LÍNEA 1
Antes de dar el primer paso, piensa si puedes dar el segundo. Cuanto más alto crece el árbol, más profundo se deben hundir sus raíces. El hexagrama 53 comienza con una línea tenue (Yin), es el primer paso que los gansos dan hacia la orilla, se reúnen antes de emigrar, están ansiosos, hay coraje de sobra (voluntad juvenil) no sin descuido, l 'inexperiencia inicial nos hace cometer muchos errores y por esto también recibimos críticas, pero no nos dejemos desanimar. Los jóvenes son demasiado entusiastas para calcular, el joven Ganso toma el vuelo migratorio como una aventura sin saber cuántos riesgos (pero no nos engañemos cuántas veces esta lúcida estupidez juvenil es la fuerza sin la cual nunca habríamos tenido tantas buenas y bellas experiencias, incluso las malas había que hacerlas para crecer). Jesús también habló de esta Fuerza inicial, una fuerza lenta, prudente, cautelosa cuando dijo: "¿Quién de vosotros, queriendo construir una torre, no se sienta primero a calcular el costo, si tiene los medios para llevarla a cabo? Para evitar que, si pone los cimientos y no puede terminar la obra, todos los que lo ven comienzan a burlarse de él, diciendo: Comenzó a edificar, pero no pudo terminar la obra, o como rey, yendo a la guerra contra otro rey, ¿No se sienta primero a examinar si puede enfrentarse con diez mil hombres al que viene a su encuentro con veinte mil? De modo que quien de vosotros no renuncie a todos sus bienes, no puede ser mi discípulo” (Lc 14,28-33). Porque la apuesta es por el Todo (Yang) así que vosotros debéis ser Nada (Yin).

LÍNEA 2
No tire demasiado de la cuerda, de lo contrario se rompe, después de momentos de tensión siempre necesitamos pausas de relajación, divagar, no hacer nada. El sabio que siempre se hace el sabio se vuelve petulante y finalmente imprudente, el verdadero sabio también sabe bromear, hacerse el tonto y reírse entre amigos.
Aquí está la segunda línea del hexagrama 53, el desarrollo constante y gradual. Los gansos saben que el viaje es largo y siempre encuentran acantilados sólidos donde detenerse, descansar, refrescarse. El ganso salvaje es un animal incansable, fiel, prudente. Son grandes compañeros de viaje, colaboran, señalan con gran ruido un peligro y hacen equipo para defenderse; Mamá Ganso es un símbolo de protección, un tótem del instinto vital. Si algún ganso se siente mal, otro se queda a su lado hasta que se recupere para retomar su viaje y si no puede hacerlo, se queda junto a él hasta que muere. Ese acantilado firme y seguro del que hoy nos habla el I Ching es precisamente esta lealtad.

LÍNEA 3
“El que piensa que está en pie, cuídese de no caer” (1Cor 10,12) Esta máxima bíblica es muy apropiada para la 3ª línea del hexagrama 53, porque en el camino del crecimiento interior muchos adquieren demasiada confianza en sí mismos hasta el punto de pensar que ahora son irreprochables, invencibles, en cambio este es su error de principiantes. De hecho, durante el viaje de inmigración el ganso intenta volar demasiado alto pero el viento lo golpea y lo hace caer. ¿Recuerdas el famoso juego de la Oca? es un antiguo juego iniciático, es un viaje a lo más profundo de uno mismo, el objetivo es llegar al centro (el Ego) para deshacerse de él, pero el camino es siniestro, símbolo de un viaje de regreso a uno mismo; en el centro hay un Jardín (El Edén Perdido), la subida hacia el origen, hacia el Uno. ¿Cuántas cajas hay? 64 (contando el Edén) por lo tanto lo mismo que los hexagramas del I Ching. Hablando cabalísticamente sería (6 + 4 = 10; 1 + 0 = 1) el símbolo de la Unión del Alma con el Uno (Dios). Curiosidad: no olvidemos que incluso el juego de ajedrez se compone de 64 casillas (8x8 igual a los hexagramas del I Ching). Una de las peculiaridades del juego de la Oca es que muchas casillas son castigos: te encarcelan, te hacen perder tu turno, te degradan, incluso está la casilla de la Muerte (como el Arcano del Tarot) que te hace reiniciar desde el principio del juego... esto es lo que sucede en la vida cotidiana y sobre todo en la vida espiritual. Los gaélicos llamaban Oca su maestro espiritual, una guía de vida y juego. Hay que tener en cuenta que la Oca era vista como la parte femenina de la materia mientras que el Cisne la masculina, de hecho en los mitos griegos Zeus transformado en Cisne fecunda a la ninfa Némesis que se había escondido en una Oca para escapar de Zeus sin éxito. El canto del Ganso es el del caos primordial creativo, mientras que el canto del Cisne es el de la muerte inminente (vida y muerte). Así que la prueba de que las personas inteligentes suelen cometer un gran error, radica en considerar al ganso un animal estúpido, sin entender que su comportamiento (entre los pájaros) es de los más evolucionados para aprender nuevos comportamientos, incluso cuando su maestro es un humano, no es casualidad que el Ganso sea el protagonista de muchos cuentos de hadas (somos tan tontos que nos cuesta entender si Donald es un ganso, un pato, un cisne, un patito... ¿o qué? creer que el patito es feo cuando en realidad es un aguila). En resumen: I Ching de hoy nos dicen que, en lugar de hacer discursos profundos, a menudo solo estamos graznando, por lo que el ganso debe bajar de altura y evitar que el viento demasiado alto lo golpee fuerte en la cabeza.

LÍNEA 4
Para muchos Dios está en el cielo, para mí está en el corazón de los sabios y es esa fuerza que no te permitirá patear a un perro, ofender a un anciano, tratar mal a sus padres, traicionar al amado... si todos tuviéramos este Dios, el mundo sería un paraíso.
Pero la 4ª línea del Hexagrama 53 del I Ching también nos dice: El ganso salvaje vuela alto pero sólo encuentra la rama de un árbol, no es su lugar pero se adapta a él. ¿Se ha adaptado alguna vez el ser humano a su condición efímera y finita? No, porque no sigue el ejemplo del ganso y sin embargo lo considera un animal estúpido. ¿Pero por qué? Se suele creer que es tonto por dos razones: puede volar y sin embargo prefiere caminar, pero lo hace porque se ha adaptado a un espacio de sobrevivencia, el ser espiritual también lo hace, vuela en el espíritu pero debe aprendan a adaptarse al mundo material, esa débil rama de la vana y mortal existencia llena y hecha de estúpida charlatanería de la vida social. De hecho, aquí está la segunda razón: el ganso chilla y hace un ruido aparentemente sin motivo, por similitud cuando hay una persona que dice tonterías se le llama ganso, en cambio este animal hace un ruido para defenderse, para molestar a quien lo perturba. De hecho también encontrarás muchos espíritus elevados muy gruñones y aburridos, no les importa esconderse entre tontos como la oca, lo que les importa es que no los molesten. El árbol es símbolo de elevación espiritual, vida que sube al cielo, agacharse en el árbol es encontrar contacto con lo supremo, pero es en esta búsqueda que el Ganso como hombre espiritual pierde el contacto con su naturaleza y realidad. . .. Somos seres espirituales que tenemos una experiencia material (visión natural), no somos seres materiales que vamos a tener una experiencia espiritual eterna (visión religiosa o sobrenatural)... continúa en la 5ª línea

LÍNEA 5
Cuanto más alto subas, más solo estarás y más tendrás que tener la fuerza para soportar la crisis del desapego. ¿Porque? En nosotros sucede como en la naturaleza, si un cuerpo se aleja de la superficie terrestre en un punto determinado debe vencer la fuerza gravitacional, esto a nivel psíquico es el desprendimiento del Ego, uno queda un tanto a merced de algunas alucinaciones, desconciertos, dudas. El ganso salvaje vuela tan alto que la manada ya no lo reconoce. Los primeros en dar la espalda serán muchos a los que creísteis cercanos: parientes y amigos (los peores enemigos serán los de vuestra casa, dijo Jesús). Aquí está la conexión con lo supremo, ¿es decir? es un momento en el que te encuentras con Dios y terminas por no creerle, para entenderle leemos esta historia: un hombre estaba aferrado a una rama delgada a punto de caer a un abismo. Empezó a orar a Dios: “¡Creo en ti ahora, por primera vez en mi vida! Mantendré la fe y viviré en consecuencia de ahora en adelante, ¡lo prometo! Por favor, sálvame", suplicó. "Te escucho, te salvaré. Deja la rama", fue la respuesta. "¿Qué? Estás loco o qué ?!" gritó el hombre. No puedes encontrarte con Dios y no volverte divino, entonces, ¿qué miedo tienes de dejarte ir o llevar? No hay conexión con el Supremo si no te cancelas a ti mismo. La gente tiene un miedo terrible a la vida y la muerte. Para escapar de la realidad , eligen el cuento de hadas sobre la conexión con el Supremo. Toma cualquier tribu aislada y verás que tienen un dios, a quien pueden conectarse directamente o a través de los chamanes, para mejorar su vida de inmediato. Esta idea se ha apoderado de todas las civilizaciones, para reducir los miedos y hacer la vida menos traumática. ¿Quién puede tener el coraje de enfrentarse a la vida tal como es, sin ilusiones, sin esconderse tras dogmas banales? Los únicos que dudan verdaderamente de la existencia de Dios son los que la han conocido, mientras que los que están totalmente seguros de que Dios existe o absolutamente seguros de que Él no existe, son soñadores engañados románticos, incluso místicamente. A nivel subconsciente, la inmersión en la realidad sutil (el Ganso volando demasiado alto) es extremadamente peligrosa, pues conduce a una intensificación del efecto de materialización de todos los miedos humanos sin ningún consuelo. La iluminación y la locura se identifican, la única diferencia es que en la primera eres conscientes de ello, en la la segunda solo creen que lo son.

LÍNEA 6
No hay héroes sin cicatrices y las cicatrices reales se tapan, nunca con ostentación.
Última línea del hexagrama 53, es la apoteosis (en griego significa Asunción de un mortal al cielo, deificación), la Oca llega a los cielos pero pierde sus plumas, es normal que los grandes espíritus tengan que pagar una tasa de depresión psíquica para poder llevar una vida determinada (la soledad, el silencio, la incomprensión, el inconformismo, la crítica social, la vida de gueto, etc... son precios a pagar por la paz interior). Sin embargo, como cita un pasaje bíblico: "En realidad estamos atribulados por todas partes, pero no aplastados; estamos conmocionados, pero no desesperados; perseguidos, pero no abandonados; golpeados, pero no muertos, llevando siempre y en todas partes la muerte de Jesús en nuestro cuerpo" (2Cor 4, 8-10), Jesús es la individuación psíquica de cada alma que se realiza en sí misma, he aquí la oca de los cielos, pero repitamos que la fuga le hace perder las plumas. Que son las plumas sino las heridas, los pedazos de vida dejados en el camino de la vida, golpes que nos hicieron crecer, son plumas como trofeos como enseñanzas y advertencias. Tu vida es un ejemplo para los demás, aunque te sientas desprendido de los demás, no es desprecio sino un sano límite, un espacio de conquista necesario para vivir tu paz. En los antiguos rituales, las plumas de grandes pájaros se usaban para danzas sagradas.

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