Línea 1
Cuando tu mente comprende la grandeza entonces dejas de querer poseerla, sabes que todas las fuerzas tienen un límite más allá del cual para sostener tal grandeza solo tienes que fingir, por eso los sabios son tales porque renuncian a tal ambición; su grandeza radica en su pequeñez, su brillo en saber permanecer en lo desconocido. ¿Qué es un Dios? Es alguien que no necesita nada y tu ¿quieres tenerlo todo para sentirte como un Dios?
Línea 2
La naturaleza nos ha proporcionado los medios para progresar, tenemos el potencial necesario para entender la vida, ¿por qué no podemos?, una flor tiene un perfume dentro no hay que ir a comprar un perfume para ponérselo encima, ha un olor por naturaleza, ¿porque no podemos entender la vida si tenemos la comprensión o la inteligencia por naturaleza? I ching nos dicen que también tenemos un carruaje donde llevar lo necesario (el corazón donde guardar el equipaje de las experiencias, y los caballos del intelecto para sacar fuerzas, provecho y convicciones que llevamos encima). El mayor tesoro por descubrir está dentro de nosotros, si no seguimos la naturaleza es "normal" que nos quedemos siempre atrasados.
Línea 3
Para ser grande tienes que darte, entonces tienes que hacer grande a los demás, compartes tu grandeza. De esta manera permaneces humilde y todos se acercarán a ti sin miedo. Los falsos poderosos en cambio se atrincheran en su poder, intimidan a los demás y no permiten ningún espacio, son temidos pero no respetados y en el momento del derrumbe quedan solos y traicionados. El sabio sabe que su sabiduría no disminuye si la da, sino que se multiplica, no es como los bienes materiales que si los das ya no los posees. Las cosas verdaderas no se poseen, pero tú estás poseído por ellas y feliz de dárselas a los demás.
línea 4
El sabio actúa pero nunca compite, no tiene a nadie más frente a sus ojos que a sí mismo, por lo tanto no es inferior al emperador ni superior a ninguno si fuera el mismo emperador, trata de ser sólo él mismo. Los grados sirven para hacernos entender dónde estamos, no quiénes somos. No te fijes en lo que quieren los demás, terminarás queriendo las cosas de los demás, en cambio aprende a averiguar lo que tu quieres sin compararte. Si te jactas de algo entonces eso de lo que te jactas en realidad ha perdido su valor, eres tú quien está tratando de valer más y no te das cuenta que no estás seguro de lo que te jactas.
Línea 5
Eres como una melodía, si estás tranquilo infundes calma, si estás nervioso las vibraciones del nerviosismo llegan a quienes te rodean, nuestro estado de ánimo es una caja de resonancia, afecta a todo el entorno que nos rodea. Así que creemos el hábitat donde vivimos, esta simple acción muchas veces es ignorada y pocos la ponen en práctica: si quieres confianza, infunde confianza, si quieres alegría, emana alegría. Encontrarás a alguien que no acogerá tus vibraciones, pero entonces este se alejará, será como el que escucha el ruido y quiere su paz, irá en busca de su paz y te dejará en la tuya.
línea 6
Nuestros talentos siempre vienen de arriba, no nos pertenecen, les pertenecemos como superiores y nos dan sentido a la vida. Volvernos engreídos, creer que somos los poseedores de alguna verdad y sabiduría, es ceguera y soberbia. Somos mensajeros, no somos el mensaje, somos el medio, no el fin.
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