1. El Uno - Taiji

 

TAIJI

Taiji es el movimiento incesante del Wuji, energía en estado puro, es decir, aún no manifestada, desprovista de espacio y tiempo, la NADA (lo que ves en la foto de color gris), por lo tanto cuando podemos ver el Wuji lo percibimos como un movimiento, una interacción de fuerzas opuestas: bien-mal, luz-oscuridad, amor-odio, alto-bajo, ángeles-demonios, etc... en una palabra Yang-Yin. Mientras que Wuji es el mundo dual o dualidad, Taiji es el dualismo, en la dualidad las cosas son distintas pero unidas no se excluyen, en el dualismo las cosas se dividen, se excluyen, se distinguen y hasta en casos extremos se destruyen entre sí (blancos contra negros y viceversa, hombres contra las mujeres y viceversa, los fieles contra los ateos y viceversa...etc). Cuanto más la persona se conoce a sí misma y va dentro de sí misma (Yin) descubre la unidad con el universo (el Wuji) cuanto más se ignora a sí misma y se pierde en el mundo externo y material (Yang) más necesita crear un punto absoluto que lo protege, de ahí el Falso Uno, los totalitarismos, los monoteísmos fundamentalistas que se consideran poseedores de la verdad absoluta y proscriben y dan muerte a todos aquellos que no piensen como ellos (nuestra historia está llena de estas corrientes políticas, filosóficas, religiosas y científicas).

Toda la multiplicidad de fenómenos, todo el universo, visible o invisible, es el resultado de la interacción entre Yin y Yang. La interacción entre las dos fuerzas primordiales opuestas es la expresión esencial de Wuji (la única fuerza que, sin embargo, se manifiesta en todo, en este sentido panteísta. Incluso en el Nuevo Testamento cristiano hay un rastro de esta concepción filosófica, cuando S. Pablo dijo: "... para que Dios sea Todo en todos" 1 Cor 15, 28). Wuji significa por tanto ausencia de polaridad, ausencia de diferenciación, estado unitario, mientras que Taiji es el proceso de interacciones en su suprema polaridad, pero son la misma cosa, de aquí podemos entender lo peligroso que es el numero 1... 

EL PELIGRO DEL NÚMERO 1

Hemos dicho que el 1 que vemos es una manifestación del 0 (la Nada absoluta -Wuji- crea el Todo en su movimiento -Taiji- pero...) pero lo podemos concebir mentalmente sólo porque lo dividimos, lo fragmentamos, lo separamos (ya que lo absoluto no puede ser aceptado de manera absoluta sino sólo relativa, el infinito no puede ser concebido sino de manera finita, porque somos limitados entonces percibimos todo dual a nivel mental), en cambio el Uno es una manifestación de las dos fuerzas de polaridad que generan todo, así que si es UNO, ¿por qué no vemos su doble naturaleza? Es como UNA moneda aunque sea UNA tiene DOS caras, no puedes dividirlas sino la moneda desaparecería (si la moneda tuviera un buen grosor también podrías cortarla y partirla por la mitad en dos rebanadas pero el resultado sería el mismo : tendrías dos monedas con 4 caras, porque el nacimiento ocurre por desdoblamiento, como en las células). Así cuando el 1 se equilibra se abre al 2, se da, lo hace existir, pero si permanece cerrado en sí mismo sofoca al otro, lo somete, lo esclaviza, lo destruye. Miren todas las filosofías, religiones, políticas que se basan en el 1 absoluto (monoteísmo, totalitarismo, egocentrismo, imperialismo) a la larga son dañinas, destructivas y peligrosas. La individualidad es la esencia del ser humano pero el individualismo es su perdición, todos y cada uno de nosotros somos únicos pero no somos los únicos, no estamos solos en el mundo, el 1 que quiere ser el único tiende a destruir a los demás y en última instancia, a él mismo. Vivimos en una sociedad donde se promueve el primer lugar, la individuación, el control supremo (liderazgo), la verdadera y única religión, la única verdad... pero son todas manifestaciones psicóticas de una mentalidad sin el espíritu real del 1 que sería el 2, la alteridad, comparación, diálogo, tolerancia, entrega de uno mismo (1) al otro (2).

YI - NUMERO 1

"El Tao que se puede definir como Tao no es el verdadero Tao" - Lao Tzu de "Dadejing El Libro del Camino y la Virtud". Esta frase es contradictoria, porque si el verdadero Tao no se puede definir, incluso este pensamiento es ya una definición, por lo cual es falsa. En otras palabras, esta imagen que nos hacemos de lo inimaginable, de la Nada ya es algo, aquí está el simbolismo perfecto del número absoluto 1 (si fuera absoluto, solo existiría el Uno)

El Uno es el punto, la recta (el eje), la esfera. En el Uno coexiste el Todo no expresado e indiferenciado del que necesariamente permanecerá distinto; en este sentido es Plenitud, Completitud, eso es Perfección. El Uno está conectado a la figura del Cielo (TIAN) y por analogía al Padre. Al igual que el Padre, el Número 1 le da al ser humano el aliento de vida (QI), el espíritu (SHEN) y lo mantiene en su integridad como individuo, en su Unidad (YI). Se considera un número masculino, el principio activo y material de la creación. También se llama motor principal. El Uno es la fuente de lo que existe, de lo que es distinto del Uno: de él emanan formas, dimensiones, colores, direcciones, espacio, luego el tiempo y la diversidad.